La ingeniería de costas se enfrenta al reto de proteger estos espacios pero a su vez asegurar un aprovechamiento sostenible en el tiempo que permita potenciar su actividad económica pero dentro de una adecuada calidad ambiental. Actualmente las zonas costeras representan un alto interés económico y ambiental.
Y en esta formidable tarea que tenemos por delante, los Ingenieros de Caminos y los Ingenieros Civiles estamos llamados a desempeñar un importante papel. Nuestra función y nuestra obligación es la de poner todos nuestros conocimientos y todos nuestros esfuerzos para tratar de conseguir que la población mundial pueda satisfacer, a pesar de las dificultades de este nuevo escenario, todas sus necesidades básicas. Tenemos asimismo que propiciar las condiciones para avanzar en el desarrollo sostenible de los países menos favorecidos y en la mejora de las condiciones de vida de las sociedades menos avanzadas.